Desmoldeante en Aerosol Dübör.... Impresionante!!!

    He conocido un producto increible que os va a ayudar un montón en vuestra repostería. Como sabéis, yo soy toda una novata en temas de repostería, seguramente la mayoría de vosotros conozcáis ya éste producto.

    Pero para los que os ocurre como a mí, que todavía untáis de mantequilla los moldes para que no se os peque el bizcocho.... vais a alucinar con éste producto!!!!!!!!!!

    Se trata del desmoldeante en aerosol Dübör.

   Está compuesto de aceite, lecitina y cera vegetal, no deja ningún sabor ni olor a en nuestros bizcochos. Tan sólo hay que agitar bien el envase, presionar el pulverizador y rociar el molde antes de usar.

    Para mí era un rollo tener que acordarme de que tengo que sacar la mantequilla para que esté a temperatura ambiente y pintar el molde (que por unos lados quedaban pegotes y por otros no) y bueno, si el molde era redondo o cuadrado, luego a luego el trabajo parecía más sencillo, pero tengo un par de moldes que tienen muchos rincones por las formas que tienen y... me daba una pereza usarlos!!!!!!!!!!!..... 
    Primero por que untarlos de mantequilla era demasiado laborioso (tardaba más tiempo en untarlo que en preparar la masa del bizcocho) y luego porque por mucha mantequilla que le pusiera, el bizcocho se agarraba a alguno de esos rinconcitos.

    Mirad, éste molde en concreto, lo compré para hacer pequeños bizcochos, lo destrocé la primera vez que lo utilicé. Os cuento:

    Las instrucciones decían que antes de usarlo por primera vez, tenía que untarlo con mantequilla. 
    Así lo hice y el bizcocho se pegó por todos lados, lo tuve en agua 2 horas, y no podía limpiar los restos pegados del molde. Al final decidí dejarlo en agua toda la noche hasta el día siguiente que lo volví a lavar.    Tanto le dí, primero con las manos y un poco de jabón, y luego con un estropajo de espuma, que al final el brillo que tenía la silicona, se lo acabé quitando, pero es que no tenía otra opción para limpiarlo.

    Cuando utilicé por primera vez el aerosol Dübör  le devolvió a mi molde ese brillo que había perdido. Lamentablemente no tengo fotos, pero os muestro como está ahora.

    Como os indicaba arriba, sólo hay que agitar muy bien el envase y aplicarlo sobre el molde:

    Quedará una película burbujeante sobre el molde:

    No os preocupéis, ya que no va a dejar ningún sabor ni olor en vuestros bizcochos. Ahora sólo tenéis que rellenar el molde con la masa y cocinar.

   En éstos moldes pequeños, ni siquiera hizo falta que esperara a que se enfriaran para desmoldarlo, recién sacado del horno si presionas ya se separa:

    Mirad, una vez desmoldados, cómo queda el mode, completamente limpio, lo único que se ha adherido es el azúcar caramelizada, que con un chorro de agua (sin necesidad de detergentes) se limpia y queda perfecto:

    Es un producto ideal para hacernos más fácil nuestras recetas de repostería y que además cuida nuestros moldes.

    Y aunque os estoy hablando de Dübör como un producto para repostería, también nos servirá si queremos hacer pasteles salados, incluso para poner una capa sobre los canelones o lasaña para evitar que se pegue a la bandeja.

    Probad el aerosol Dübör, amig@s y veréis cómo os sorprendéis tanto como yo.